El parque está vinculado al antiguo convento de Gilitos, hoy centro sociocultural del Ayto. El convento se levantaba sobre un solar, en una zona alta que dominaba el llano del valle formado por las terrazas del Henares. El convento se erigió sobre un solar antiguamente denominado como ‘La horca vieja’ donde había una pequeña ermita bajo la advocación del Santo Ángel de la Guarda. Fue en 1576 cuando con la ayuda del caballero de la orden de Calatrava, Diego de Vargas, se instó a la cofradía dueña de la ermita a que cediera el edificio y las tierras colindantes para que estableciera una congregación de franciscanos descalzos, conocidos como gilitos por su procedencia del importante convento de San Gil en Toledo. No hay que olvidar que Alcalá formaba parte del arzobispado de Toledo. En 1625, doña Catalina de Mendoza reedificó todo el conjunto arquitectónico con iglesia en planta rectangular, y adosadas a la misma las casas conventuales en torno a un pequeño claustro, todo ello en una sencilla arquitectura de ladrillo. Tras la desamortización de bienes de la iglesia de 1836 el edificio pasó por varios propietarios, entre ellos el Conde de Canga Argüelles, que lo destinó a usos agrícolas. Al comienzo de los años 80 del siglo XX el espacio estaba en estado de abandono y ruina. Fue en ese momento cuando pasó a ser propiedad del Ayto. y en los años 90 se procedió a su rehabilitación añadiendo un nuevo edificio al este unido al primigenio con una pasarela acristalada. En junio de 2010 durante la ejecución de las obras para la construcción de un auditorio en el recinto, aparecieron en una zanja conjuntos de huesos humanos que podrían estar relacionados con el convento franciscano o con el cementerio del municipio que existió allí entre 1820 y 1834 antes de que se creara el actual cementerio municipal de San Roque.
Sábado 15 de junio
Sábado 22 de junio
Domingo 7 de julio